Ahora, cuarentas años después de que la NASA fotografiase la luna, los chinos afirman que tienen el más detallado mapa de dicha.

En 1996, se mostraron las primeras imágenes, pero éstas eran de baja revolución.

La NASA las ha recuperado con una nueva tecnología que usa las antiguas máquinas analógicas que hicieron la fotografía y un nuevo proceso digital para sacar la información de las antiguas cintas magnéticas.

gracias al complicado sistema de grabado, se han conseguido unos resultados muy útiles.
Con una cámara de dos lentes, una con un ángulo de 610mm para la alta revolución y la otra de 80mm.

Para recuperar los datos, primero han tenido que reparar los grabadores originales, posteriormente han digitalizado los datos recuperados (unas 1.500 cintas), sometidos a un software diseñado para sacar la información y producir imágenes como la mostrada en la foto.

Si vuelven a ir, ahora se verá de maravilla.